Mi cuarto día es estar en la presencia de Jesús
Estoy atravesando desde hace un tiempo una enfermedad fuerte (cáncer). Bueno, pues partiendo de ahí y de que tengo una preciosa familia con dos hijas y un marido, que es un tesoro, os cuento…

Mirad mi día a día, es una sorpresa continua, comenzando porque no sabes como vas a amanecer ni que te tiene preparado el Señor, tú tienes unos planes y la enfermedad te va dando otros, por lo cual todo lo tienes que dejarte en sus manos.
Ayer domingo… no toco poder estar presencialmente en la Eucaristía, tocó buscar otra alternativa, pero sin misa no me quede, es muy importante para mí recibir los sacramentos, y si no puede ser de una manera busco la fórmula para poder estar.
En lo cotidiano de cada día…, no puedo realizar las tareas del hogar, Señor échame un cable, que contigo puedo, yo sola, no es posible. Mi oración es un estar continuamente pidiendo al Señor su fortaleza y ofreciendo mis dolores.
Hay una jaculatoria que yo continuamente me repito “El Señor es mi Pastor, nada me falta” y otra que me ayuda mucho “El Señor es mi Fortaleza y mi Guía”
Me gusta leer el evangelio a diario, y rezar por mis santos de al lado. Que son mis hermanos en la fe, es tan importante la comunión de la Iglesia, el rezar unos por otros, no sabemos qué zapatos calza cada uno de nosotros.
Los niños de catequesis son mi debilidad, pero ahora mis circunstancias de salud no me lo permiten, pero sí que les preparo su catequesis y mis niñas mayores (ya confirmadas) les dan la catequesis.
Gracias, por tanto. ¿Y TODO ESTO POR MÍ? Ahora lo comprendo, ¡¡Cuanta falta me haces Padre.!!
FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN
Cursillo nº 1.060 – Mª Carmen Herruzo
Pozoblanco (Córdoba)
Comparte tus opiniones
Sin comentarios