Como estaba previsto, el Movimiento de Cursillos de Cristiandad de Córdoba se daba cita, en la Casa de San Pablo el pasado sábado 16 de junio, para ponerle fin a todo un curso bendecido, día a tras día, por el Señor. En esta ocasión estaban convocados todos aquellos que han experimentado la vivencia de un Cursillo de Cristiandad, además, de amigos y familiares cercanos a nuestro Movimiento, y que quisieron compartir con nostros una gran velada marcada por la alegría y el matiz propio de aquellos que experimentan a Cristo en sus vidas.
Se esperaba, y así fue, que la noche se llenara «de colores» para poder compartir y convivir unos con otros. Pudimos disfrutar, una vez más, de una gran orquesta organizada, con gran esfuerzo pero también con ilusión, por personas cercanas a nuestro Movimiento de Cursillos y que supieron poner notas de alegría, espontaneidad, humor y diversión. Fue una ocasión para el reencuentro y para poder disfrutar de un buen rato con nuestras familias y amigos cursillistas, en una noche en la que no faltó detalle para sentirse como en «casa» en nuestra Casa de San Pablo.
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